CARTA A UN AMIGO??

Os traslado la carta que un ciudadano ha enviado a Chaves (D. Manolo), y que por supuesto no ha contestado

"Como V.E. sabrá desde la publicación de la nueva Ley del Suelo se ha paralizado en la practica totalidad de las zonas rurales cercanas a los pueblos y ciudades de Andalucía, especialmente en Málaga, la actividad de la construcción de casitas rurales, lo que ha provocado un enorme malestar en todos los pueblos limítrofes con la Costa, además de una verdadera "crisis económica" de pequeñas economías que Vivian de hacer una casita para un extranjero o persona residente en la ciudad para vacaciones y fines de semana y/o turismo rural. Dada la actual situación de recesión económica, pienso que seria el momento oportuno de regular las construcciones en "suelo rural" para así posibilitar especialmente a los pequeños municipios una salida laboral y turística, que se podría sostener vigorosamente. Recientemente estuve en el Sur de Francia y en Italia y pude comprobar con satisfacción la gran cantidad de casitas rurales que existen en las zonas cercanas a las ciudades turísticas y el mantenimiento de la arboleda y huertos. Por lo anterior paso a continuación a plantearle someramente las premisas, que en mi humilde opinión, debería reunir una urgente Ley de Construcciones Rurales y sus ventajas, tanto económicas como medioambientales:

1º) La Ley permitirá que en zonas rurales que no constituyen una explotación agrícola "rentable" se puedan realizar construcciones rurales para recreo y turismo.
Como todos sabemos existen gran cantidad de fincas que por su bajo rendimiento agrícola están de hecho "abandonadas", con gran perjuicio para el medio ambiente y también para la economía de la comarca. Es a este tipo de fincas a las que se les puede dar una utilidad que sea capaz de regenerar la "masa forestal" por una parte y por otra crear unas expectativas de negocio de ocio que podrá a su vez crear muchos puestos de trabajo.

2º) La Ley deberá determinar las parcelas mínimas, que se podrán establecer en función de si el suelo es de regadío, secano, de zonas montuosas y de zonas de sierra, estableciendo por ejemplo parcelas mínimas entre 5.000, 10.000, 25.000 y 50.000 m2, respectivamente. Por supuesto las zonas de protección podrán tener un régimen mas restrictivo.
El aprovechamiento de construcción se podrá cifrar en un 0,05 m2t x m2 suelo, que es muy bajo y no crea asentamientos.
Los propietarios que soliciten la licencia de construcción deberán comprometerse entre otros requisitos a los siguientes:
a) En caso de tener arboleda la finca se comprometerán a mantener la misma y a reponer los árboles que se sequen por cualquier motivo, y en caso de no tener masa alborea a repoblar al menos el 30% de la superficie de la parcela del tipo de árboles autóctono o que se le indique por la Consejeria de Agricultura o Medio Ambiente.
b) A dotar a la vivienda de depuradora de aguas residuales ecológicas.
c) A dotar asimismo la vivienda de instalaciones solares para la energía de agua caliente y eléctrica.
d) Tendrán que acreditar el suministro de agua suficiente para atender las necesidades de la casa.
e) A soportar el gastos de los servicios tales como reciclado de basura y a renunciar a los servicios propios de las zonas urbanas, como transporte público, calles urbanizadas, abastecimiento de agua, saneamiento, energía eléctrica, colegios, y demás equipamientos propios de las zonas urbanas.

Con lo anterior la Comunidad Autónoma podrá conseguir los siguientes fines:

Primero.- Una repoblación forestal gratis para el Estado del 30% de las zonas sin árboles y el mantenimiento correcto de los árboles existentes.

Segundo.- Una regulación legal que evite el descontrol de las construcciones rurales y los asentamientos semiurbanos ilegales. Pudiéndose proceder a legalizarse todas las viviendas antiguas que se adapten a estos requisitos o dejando fuera de ordenación a las que no se adapten.

Tercero.- La creación de muchos puestos de trabajo y la regeneración de comarcas enteras, lo cual dará vida a pequeños pueblos que no pueden sobrevivir sin las subvenciones actuales.

Cuarto.- Seguridad jurídica a los inversores, principalmente extranjeros, que en la actualidad están muy preocupados por sus inversiones en casitas rurales. Como V.E. sabrá desde la publicación de la nueva Ley del Suelo se ha paralizado en la practica totalidad de las zonas rurales cercanas a los pueblos y ciudades de Andalucía, especialmente en Málaga, la actividad de la construcción de casitas rurales, lo que ha provocado un enorme malestar en todos los pueblos limítrofes con la Costa, además de una verdadera "crisis económicas" de pequeñas economías que vivían de hacer una casita para un extranjero o persona residente en la ciudad para vacaciones y fines de semana y/o turismo rural."